El domingo 27 fui a casa de Gaby, mi ex compañera de estudios, amiga y roomy. Ella preparó una lazaña muy rica, estaban además de Rubén y yo, Chamín, un amigo de Sonora que ahora vive ahí, Katya y Sergio, su pareja. La casa está ahora llena de plantas porque Chamín las cuida, con muebles nuevos, se ve más grande y arreglada. La pasamos muy bien. Igual no pude hablar mucho con Gaby, ella recién salía de vacaciones el 2 y se iba a Estados Unidos, así quedamos a su vuelta comunicarnos para vernos sólo nosotras. Pero la vi muy bien, contenta e ilusionada con su viaje donde verá a un muchacho. En la noche salimos para Oaxaca a ver a mi tía Martha. Mi tía está muy bien, muy contenta, su depa es muy bonito. Estuvimos con ella, conversando, paseando, jugando dominó de tren con Chago y Mario, vimos un día a Gaby y a Gibrant (hijo de Kazt). Pudimos ver el espectáculo de la Gelaguetza en Villa Etla, comimos chapulines, tlayudas, tostadas, amarillo y otras comidas de Oaxaca. Además vimos una película en un cine culturoso que se llama El Pochote (y está en la lista de las quince cosas que deberías hacer cuando estás en Oaxaca). La película era La gran venta, un documental sobre las privatizaciones de servicios en distintos países. Realmente muy buena, me gustó mucho, es dura e indigna saber lo que hacen con la gente. Se las recomiendo mucho. El tiempo como siempre pasó volando y ya nos tuvimos que ir para Huatulco, al mar. Lo bueno es que mi tía Martha está cerquita y cualquier ratito me puedo escapar a visitarla, de paso que hay cosas que tengo pendientes de conocer en Oaxaca que es una ciudad muy tranquila y bonita, con una vida cultural muy activa. Además su sobrina estará en el DF pronto y seguro ahí nos veremos la próxima vez en unas semanas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario